Tecnofobia: qué es, cómo prevenirla y cómo superarla

Juan Nieto (Psicólog@)

30 septiembre, 2024

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En un mundo cada vez más digitalizado, la relación que las personas tienen con la tecnología puede ser muy diversa. Mientras algunas personas se adaptan sin ningún tipo de problema, otras pueden experimentar temor o rechazo hacia ella, lo que conocemos como tecnofobia. A continuación, exploraremos qué es, cómo se manifiesta y cómo se puede superar esta fobia para que la tecnología sea una herramienta aliada y no un obstáculo.

Qué es la tecnofobia

El origen de la tecnofobia se remonta al nacimiento de la tecnología misma. Sin embargo, no fue hasta la década de los 80 que se acuñó el término y se comenzó a hacer un abordaje científico y académico del fenómeno.

Aunque desde entonces se han utilizado diferentes maneras de denominarlo (tecnoestrés, ciberfobia, fobia digital), casi todos hacen referencia a un miedo irracional hacia las nuevas tecnologías. La persona que lo padece experimenta una aversión a los dispositivos tecnológicos y se muestra temerosa ante las consecuencias derivadas de su uso.

Este miedo se puede manifestar en distintos niveles de respuesta:

• Fisiológico-emocional: taquicardias, sudoración, presión en el pecho, etc.
• Cognitivo: anticipaciones, pensamientos catastróficos, preocupaciones e inseguridad.
• Conductual: evitación o escape de situaciones donde estén implicadas las nuevas tecnologías.

El nivel de intensidad de la sintomatología puede variar, desde personas que se sienten incómodas con su uso hasta personas que sienten una aversión total.

Diferencia entre tecnofobia y tecnofilia

En el extremo opuesto de la tecnofobia encontramos la tecnofilia. En su forma menos problemática, es la adherencia y aceptación de las nuevas tecnologías. Sin embargo, en su faceta más extrema, podemos encontrar una relación abusiva similar a cualquier otra adicción, donde el uso indiscriminado de las nuevas tecnologías puede suponer un deterioro significativo en la vida de la persona.

Ejemplos de tecnofobia

Las causas de la fobia a la tecnología pueden ser muchas y variadas. Del mismo modo, las maneras en que ésta puede expresarse son tan diversas como las tecnologías mismas.

Una manifestación común tiene que ver con el temor a un uso inadecuado. Algunas personas se consideran incapaces de adaptarse y aprender a usar las tecnologías, lo que les genera sentimientos de torpeza o poca autocompetencia.

Otro motivo es el temor a desarrollar una adicción. El uso cada vez más frecuente de estas tecnologías ha supuesto el aumento de casos de adicción a las nuevas tecnologías, donde las personas desarrollan una dependencia y muestran síntomas asociados a las adicciones a sustancias.

El miedo a los delitos relacionados con la ciberseguridad también juega un papel importante. Muchas personas temen exponer sus datos privados y ser víctimas de delitos cibernéticos, viendo la tecnología como un riesgo potencial.

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Causas de este miedo

Las causas de la tecnofobia pueden ser variadas, pero encontramos ciertos patrones comunes:

• Rechazo a los cambios: el miedo a las consecuencias que los avances tecnológicos pueden traer.
• Dificultad en el uso: los sentimientos de incapacidad, frustración y fracaso pueden generar un rechazo sistemático.
• Experiencias aversivas: un uso inadecuado de las tecnologías o haber sido víctima de delitos puede tener consecuencias graves como la suplantación de identidad, pérdida de intimidad o robo de información privada.

Cómo prevenir la tecnofobia

La mejor manera de prevenir la tecnofobia es a través de un entrenamiento seguro y responsable en el uso de las tecnologías, acompañado de una adecuada educación sobre los riesgos que conlleva un mal uso. Esto puede prevenir experiencias desagradables que den origen a esta fobia.

Cómo superar la tecnofobia

El tratamiento más eficaz es la exposición al estímulo temido (las tecnologías), junto con técnicas como la prevención de la respuesta de escape y la desensibilización sistemática, que han demostrado ser efectivas para reducir los síntomas de ansiedad.

Además, será necesario:

• Un trabajo lento pero progresivo para eliminar la fobia.
• Técnicas de relajación para desactivar la respuesta fisiológica.
• Evaluar y modificar los pensamientos automáticos y sesgos cognitivos asociados a la fobia.
• Formación en el uso de nuevas tecnologías para mejorar la percepción de autoeficacia.

Superar la tecnofobia requiere tiempo y un enfoque adecuado. Si te preocupa la influencia de la tecnología y deseas aprender a gestionarla mejor, te invitamos a conocer nuestro curso de adicción a las nuevas tecnologías, un título superior donde adquirirás los conocimientos necesarios para ayudar a otros a manejar su relación con la tecnología de manera saludable.