Salidas profesionales de la Psicología Positiva. Por qué formarse
Rebeca Gómez (Psicólog@)
7 febrero, 2024
Cuando una servidora 😉 estudió la carrera de Psicología, hace ya algunos años, en ninguna de las asignaturas vimos prácticamente nada de Psicología Positiva, ni de fortalezas y casi no profundizamos en cómo trabajar la mejora del bienestar emocional, (sin tener en cuenta la sintomatología y el malestar) ni siquiera en los dos últimos años de mi especialización en la rama de la psicología clínica.
Esto ha cambiado mucho, y en el momento actual, la Psicología Positiva está más en auge que nunca y ha encontrado su merecido espacio en el mundo de la salud mental.
Por lo tanto, una de las salidas profesionales que se pueden plantear los recién graduados en Psicología, es justo optar por la especialización en Psicología Positiva.
Si todavía tienes alguna duda y no tienes muy claro dónde y cómo se puede aplicar la Psicología Positiva, sigue leyendo este artículo porque esto mismo es lo que te voy a explicar hoy.
Pero antes de continuar con las salidas profesionales, lo primero de todo, será conocer y recordar exactamente qué es y en qué consiste la Psicología Positiva.
¿Por qué especializarse en Psicología Positiva?
- La psicología positiva está en boca de todos y está en un punto álgido.
- Su uso conlleva múltiples beneficios y se puede aplicar en diversos entornos y diferentes ámbitos.
- La evidencia científica garantiza su utilidad. La Psicología Positiva aporta un aval científico sobre lo que probablemente ya está haciendo muchos profesionales de forma intuitiva.
- Cada vez se demanda y se necesita más y actualmente la realidad es que escasean los profesionales expertos/as en la materia.
- Desde la psicología positiva se puede trabajar con adultos, pero también con población infantil y con adolescentes.
- Gracias a la Psicología Positiva se pueden conocer y experimentar nuevos enfoques que fomentan el bienestar y la felicidad y no centrarte de manera única y exclusiva en el síntoma o en el malestar.
- Formarse en Psicología Positiva despuntará al profesional y le hará destacar y brillar en este campo.
- Queda mucha investigación por llevar a cabo en esta materia… por lo que la Psicología Positiva es ya parte del presente y será parte sí o sí de nuestro futuro.
Salidas profesionales
En el área clínica y de la salud
Queda mucho por hacer y desarrollar dentro del campo de la Psicoterapia Positiva, integrando los conocimientos que la Psicología Clínica ha desarrollado durante toda su historia y complementando con lo que hasta ahora conocemos que es efectivo en Psicología Positiva para crear intervenciones que realmente se focalicen, tanto en eliminar el malestar, como en incrementar el bienestar de las personas.
La Psicología Positiva es un gran complemento que permite que las intervenciones terapéuticas no sólo se basen en el síntoma, sino que incidan también en la construcción y desarrollo de recursos psicológicos y que favorezcan la experiencia emocional positiva.
En el área de las organizaciones y empresas
Una de las ventajas de la Psicología Positiva es que puede ser aplicada a muchos ámbitos de la vida, incluido el contexto laboral.
La definición de la Psicología Positiva que más se acerca al lenguaje empresarial, es la siguiente: “Estudio científico del funcionamiento humano óptimo” (Sheldon, Fredrickson, Rathunde, Csikszentmihalyi y Haidt; 1999).
Por lo tanto, las intervenciones de la Psicología Positiva en el ámbito de las empresas y organizaciones tendrán como objetivo principal fomentar un funcionamiento óptimo en el sentido “laboral” del término, es decir, asegurar y potenciar el rendimiento en el puesto del trabajo, mejorar la colaboración intra e inter equipos, alcanzar determinados objetivos individuales o grupales y finalmente, desarrollar líderes que sepan crear un contexto laboral favorable que permita obtener los mejores resultados.
Muchas de las intervenciones “positivas” que se llevan a cabo en empresas y organizaciones se prestan para cuantificar su impacto positivo en términos de un incremento en el engagement en sus empleados/as y líderes. Esta atención especial al engagement se explica por su gran importancia en la generación de resultados empresariales óptimos: donde hay engagement, hay resultados óptimos.
Los últimos años hemos visto un incremento de estudios de calidad que examinan el impacto de las fortalezas y la eficiencia de las intervenciones positivas en el ámbito laboral en muestras cada vez más internacionales y variadas.
En la educación
La Psicología Positiva es una fuente de herramientas muy valiosas que pueden ayudar a quienes se responsabilizan de la educación de otros seres humanos (ya sea como maestros/as o como padres o madres) para poner el foco en lo que la ciencia ha demostrado que fomenta la felicidad, objetivo que todo/a educador/a desea para sus educandos.
Como afirma Caruana Vañó (2010, p.143) "potenciando actitudes de plena consciencia y autocontrol, podemos capacitar a nuestro alumnado para desarrollar en sí mismos/as las fortalezas personales que constituyen los rasgos positivos de su personalidad. Y todo ello con el objetivo final de hacerlo más autónomo/a, más capaz de desenvolverse en el mundo que le rodea y, en definitiva, más feliz".
La psicología educativa desde una perspectiva positiva se enfoca en las fortalezas o atributos positivos de las personas en ambientes académicos. Se ha evidenciado que aquellos docentes que enfatizan en las experiencias positivas sobre el desarrollo de habilidades en los niños, hacen que éstos tengan mayor probabilidad de experimentar altos niveles de autoeficacia y otras características de desarrollo psicológico positivo.
La educación basada en los principios y herramientas de la Psicología Positiva no tiene una exclusiva aplicación desde las instituciones educativas sino que las familias son el soporte y medio principal por el que los niños, niñas y adolescentes adquieren sus valores y sus habilidades.
En el deporte
La aplicación de la Psicología Positiva al deporte pone su enfoque en las fortalezas y el florecimiento en lugar de las debilidades de atletas, y entrenadores/as (Association for Applied Sport Psychology).
En el deporte se busca obtener el máximo rendimiento, que el/la atleta sea resiliente y que el equipo tenga momentos de flujo. Esto hace del deporte un campo interesante para la aplicación de la Psicología Positiva.
Una serie de estudios influyentes muestran una relación significativa entre el rendimiento deportivo y el optimismo (Gordan y Kane, 2002, Seligman, Nolen-Hoeksema, Thorton y Thorton 1990).
La Psicología Positiva Deportiva (PPD) tiene como objetivo la optimización del rendimiento del/la atleta (Muzio, 2004) y la mejora de la capacidad de adaptación de la persona para afrontar los retos.
Por un lado, las demandas altas con tareas a menudo de gestos motores, precisos y eficaces llevan a los/as atletas a perfeccionar sus habilidades técnicas, de coordinación, físicas y su capacidad psicológica para manejar la ansiedad y el estrés.
Dentro de la psicología del deporte está aumentando la tendencia a considerar el bienestar del/la deportista no solo mediante el rendimiento deportivo. Por eso el objetivo es desarrollar las fortalezas con el fin de promover una mejor calidad de la experiencia de la competición y entrenamiento no sólo reduciendo y/o compensando las limitaciones y deficiencias que el/la deportista pueda tener.
La Psicología Positiva Deportiva por lo tanto, tiene como objetivo mejorar las experiencias psicológicas de bienestar del/a deportista, e investigar temas como los efectos positivos de la preparación mental en la expresión del potencial deportivo.
Visto el auge y la cantidad de salidas laborales y profesionales que aporta la Psicología Positiva, formarse en ello es una estupenda oportunidad.
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